Apuesta a los emprendedores

Hoy, invito a los empresarios, líderes, funcionarios, y a todos los interesados en construir una Colombia pujante, moderna y competitiva –una Colombia que renuncia a las guerras– a apostarle, de manera decidida, a los emprendedores y a la innovación.

He notado que algunos empresarios y líderes menosprecian el poder del emprendimiento y ven a los jóvenes emprendedores como un grupo marginal, poco relevante. Se equivocan.

Según el informe ‘Entrepreneurship at a Glance 2015’, publicado por la Ocde’, los emprendedores impactan 4 áreas de forma directa: creación de empleo, crecimiento económico, reducción de pobreza y formalización del sector informal. Y explica que las empresas más jóvenes, con menos de tres años de vida, representan entre el 4 y el 12 por ciento del total del empleo en la mayoría de naciones. Nada despreciable para un país que necesita generar nuevos empleos y fuentes de ingreso.

Colombia ha dado pasos importantes en materia de innovación y apoyo a los emprendedores, a través de entidades como Ruta N, en Medellín, e iNNpulsa, a nivel nacional. El caso de Medellín, que pasó de ser la capital mundial del crimen a una ciudad percibida como la más innovadora, es espectacular.

Endeavor Insight, una unidad de Endeavor que se dedica a analizar la evolución de emprendimiento en todo el mundo, documentó el caso de Medellín. En su informe del 2015 ‘Creando el ecosistema de emprendimiento en el sector tech de Medellín’, comparte tres lecciones de cómo una urbe puede convertirse en innovadora.

Primero, asevera que Medellín demostró que el emprendimiento puede ser exitoso en lugares insospechados.

Segundo, que un pequeño grupo de emprendedores es responsable del nuevo crecimiento del sector tecnológico local. En este aspecto, pone de ejemplo a Ubidots, una empresa de servicios en la nube, enfocada en la recolección e interpretación de datos de sensores. Al explicar el impacto que Ubidots está teniendo en Medellín, recuerda el caso de Fairchild Semiconductors, una compañía fundada en 1957 en una zona agrícola, cerca de San Francisco, y cuyo impacto dio origen a lo que hoy conocemos como Sillicon Valley.

Y tercero, que los fundadores que reinvierten su éxito en otros emprendedores son la clave para la creación de centros de emprendimiento exitosos.

Estas lecciones coinciden con la visión de varios líderes de la innovación en Estados Unidos, como Steve Case, fundador de America Online y exitoso emprendedor, quien considera que Sillicon Valley ha llegado a su tope y pronostica nuevos hubs de innovación en ciudades como Cincinnati, Detroit, Pittsburgh o Búfalo. Y lo mismo va a suceder en otras partes del mundo.

Colombia debería tener varios de estos hubs –¿Barranquilla, Bucaramanga, Cali?– y convertirse en líder de la innovación en América Latina, por delante de Uruguay, Costa Rica, México, Chile, que hoy nos superan, según el Indice Mundial de Innovación.

¿Cómo lograrlo? El informe ‘Disrupting the disruptors’, recién publicado por el G20 Young Entrepreneurs Alliance y Ernst & Young, recomienda 11 maneras de empoderar a los jóvenes emprendedores para el crecimiento, resumidos en 4 puntos: acceso a financiamiento; cultura de emprendimiento; entorno digital de negocios (políticas apropiadas de regulación y tributación), y conocimiento digital y del sector TIC.

¡Apostémosle al emprendimiento! Cambiemos de chip. A nuestros emprendedores les sobra el talento, pero les falta apoyo. Su impacto económico es real y Colombia lo necesita.

Consultor en comunicaciones

acavelier@gmail.com